lunes, 27 de enero de 2014

El pescador




EL PESCADOR

BARCAROLA

La vida pasa
Dulce, sencilla, 
En su barquilla
Cruzando el mar;
Libre de penas,
La vela al viento,
Halla contento
Yendo á pescar.

Tiende sus redes
En la laguna,
Cuando la luna
Brillando está,
Y en ellas saca
Peces brillantes,
Que palpitantes
Mueren de afan.

Cuando en Oriente
Brilla la aurora,
Vuelve la prora,
Saluda al sol
Y allá en las selvas
Oye las aves
Con notas suaves
Rogando á Dios.

Une sus voces
Á los cantares
Y hácia sus lares
Vuelve la faz
Y al cielo pide,
Derrame en ellos
Sus dones bellos,
Ventura y paz.

Feliz mil veces
Con su barquilla
Llega a la orilla
Do está su amor,
Nice divina,
Prenda adorada,
Mujer amada
Del pescador.

Por Diego Jugo Ramírez


Fuente: Biblioteca de escritores venezolanos contemporáneos.
Jouby et Roger Editeurs, París, 1877.
Edición facsimilar del Concejo Municipal del DF, Caracas, 1977

Para cerrar nuestro pequeño homenaje a la Semana de la Zulianidad, hemos escogido un cuadro del destacado pintor zuliano Julio Árraga Morales. La pintura, cuyo título desconozco, representa a una muchacha sentada (creo que la modelo fue su hija Violeta Árraga Zuleta) a orillas del lago de Maracaibo contemplando una escena marina. Está fechada en 1917, once años antes del sentido fallecimiento del artista. Me resolví acompañarlo de un poema de otro distinguido marabino: Diego Jugo Ramírez (1836-1903), de quien comentaremos otro día.
Julio Árraga Morales
(1872-1928)
Julio Árraga nació en en Maracaibo en 1872 y desde muy joven se notó su aplicación a las artes plásticas. Se formó primero en la escuela Normal de Dibujo de su ciudad natal (1882-1886) y luego en la Academia de Bellas Artes de Florencia, Italia,  (1896-1898). De regreso en Maracaibo se dedicó a la pintura histórica y el retrato y a la docencia. Posteriormente se dedicó al tema que lo hizo famoso: Maracaibo, su paisaje y su gente, casi todas ellas pintadas al aire libre con un cambio en la técnica y la expresión, influenciado por el impresionismo europeo. Murió en su taller de Maracaibo en 1928. Sus restos reposan en el Panteón Regional del Zulia. La Gobernación de Estado tiene en su sitio web un artículo sobre don Julio, que se puede leer por aquí.
La familia Árraga Zuleta y sus descendientes son cercanos a los afectos de mi familia. Su hijo Tito casó con mi prima Laura Acosta Matheus, madre de una grata descendencia que mantiene la proximidad y el calor familiar con sus parientes lejanos en Caracas.


2 comentarios:

  1. Bella la pintura de Árraga. Yo también la utilicé para acompañar un poema de Víctor Salazar, publicado en mi blog y en fb. El poema también me encantó. El título de la pintura tampoco lo conozco, pero lo buscaré en el libro de Calzadilla de donde lo escaneé para publicarlo. Bello su blog, muy cercano a mis intereses.
    ¡Un fuerte abrazo, Abraham!

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    1. Gracias mil, Elizabeth. Quizá lo que más cuesta en un blog es buscar la ilustración adecuada. Anoche visité Voces del Silencio, también me gustó y te sigo..

      Un abrazote.

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