viernes, 8 de agosto de 2014

El café de Nereo

Nereo Pacheco

El cabo de presos Nereo Pacheco, sin ser político, ni general, ni artista (aunque era arpista), pasó a la historia de Venezuela acompañado de una fama atroz. Era esbirro y sapo, aunque esas no eran su verdadera profesión. Se distinguía por realizar ciertas tareas de confianza en la ergástula de La Rotunda, tales como envenenar con arsénico o aderezar sopas con vidrio molido para consumo de curas y poetas presos. Mientras estos morían entre dolores y retortijones, el buen Nereo amenizaba a los acordes del arpa criolla. Las historias abundan.

Oscar Yanes en su colección Así son las cosas (Planeta, Caracas, 1996) nos narra uno de esos eventos y lo titula El café de Nereo:
Uno de los episodios del  inmediato pasado venezolano que todavía ha quedado en el misterio, es el complot de Eliceo (sic) López -un poeta zuliano, quien está injustamente olvidado- para matar al general Juan Vicente Gómez, en el Cementerio General del Sur en 1917, durante el entierro de su mamá. Nunca se supo quien o quienes habían delatado a Eliceo López, pues este fue detenido horas antes del funeral de la madre del general Gómez. Algunos dicen que el poeta iba a lanzar una bomba en pleno sepelio, cuando Gómez llegara al cementerio, otros afirman que el poeta dispararía contra el Benemérito y luego se suicidaría.
José Rafael Pocaterra, el gran escritor, contaba en aquella época que cuando se descubrió el atentado contra Gómez llamaron a declarar a varios venezolanos, entre ellos a Andrés Eloy de la Rosa, Diego Bautista Ferrer y Gregorio José Urriera, escritores casi todos. Nunca se supo quien delató al poeta, pero sí se descubrió lo que pasó el 5 de julio de 1918, en la cárcel de La Rotunda en el calabozo donde estaba secuestrado Eliceo López. La cárcel de La Rotunda -es bueno que ustedes sepan- se levantaba a unas tres cuadras de la Iglesia de Santa Teresa, en donde hoy está la plaza de la Concordia. Nereo Pacheco, el verdugo de La Rotunda, se acercó el 5 de julio de 1918 a Eliceo López en su calabozo y le dijo: "Buenos días poeta, por aquí le traigo una tacita de café, pa' que se caliente y le entre un calorcito. Hoy amanecí como una pascua, pues es el día de la independencia y tenemos que portarnos bien para que nos ayude don Simón; quien está allá arriba viendo todo, así que tómese poeta su cafecito tranquilo, que hoy no nos vamos a meter con usted".
El poeta estiró la mano temblorosa y agarró el pocillo, después se escuchó un grito horrible, Eliceo López habías sido envenenado con arsénico al igual que el presbítero doctor Régulo López Franklin. Hoy en día nadie recuerda al poeta zuliano Eliceo López, quien trató de liberar a Venezuela tratando de matar a Juan Vicente Gómez...
José Rafael Pocaterra en sus Memorias de un venezolano de la decadencia, nos amplía la lista de víctimas de Nereo. Es sumamente triste el fin de la viuda de Eliseo López:
La viuda de Eliseo López, embarazada de algunos meses, dio a luz poco después una niña. Años más tarde mendigaba por las calles de Caracas con la  huerfanita de la mano.
Otro día comentaremos el libro de José Rafael Pocaterra y, si lo conseguimos, algún poema de Eliseo López.

Desde la antigua esquina de Cárcel, hoy plaza de la Concordia

3 comentarios:

  1. Una de las cosas imperdonables que ha hecho Acción Democrática, fue convertir el monumento a los caídos en la lucha contra Gomez en un estacionamiento subterráneo. Sabe el cielo cuantos cuerpos fueron enterrados allí, ya que no había tiburones que resolvieran el problema como en el castillo Libertador en Puerto Cabello. La idea de hacer la placita de La Concordia fue muy buena, pero esa degradación me resulta insoportablemente insultante para con los que allí padecieron y murieron y hasta quienes aún viven.

    Por lo demás, ¿es que la viuda del señor Eliseo Lopez no tenía familia, ni amigos ni a nadie en este mundo? Ni sabía hacer nada? Porque esa era la época (también las anteriores) en que las señoras se mantenían bordando, tejiendo, haciendo dulcitos, poniendo una "escuelita" y eran acogidas por parientes y amigos por tiempos indefinidos

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    1. No fue tanto obra de AD, sino del gobierno del CAP I y su afán cinético, pero no recuerdo protestas de vecinos ni de la comunidad que, por el contrario, se sentía feliz de tener un estacionamkiiento. Ojalá ese gobierno hubiera sido el único que destruyó. Tenemos el caso del Museo de Arte Colonial en la esq de Llaguno, que a pesar de las protestas (que hubo y muchas, aquí y afuera) tumbaron la mejor asa de Caracas y el Gobernador del DF amenazó con cárcel a quien protestara. Recuerdo también la obra destructiva de Guzmán blanco que arrasó con lo colonial, o Eleazar López Contreras que tumbó la histórica casa de El Conde para hacer al Ministerio de Educación. Hay un largo etcétera. Tengo un amigo arquitecto que opina que la destrucción del pasado arquitectónico se debe en parte a la vergënza de un pasado pobre.

      Sobre el caso de la viuda del poeta; lo más probable es que la persecución se alargara hacia ella. Si estaba sola en Caracas y sin familia, estaba fregada.El temor a las represalias de Gómez haría que nadie la contratara o comprara lo que lograra producir. Esa tiranía no tenía nada de buena.

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  2. totalmente falso nereo pacheco gonzalez fue hecho preso en el año 1928 por asesinar a un hombre que decian temer encuentros a escondidas con la joven novia de nereo y este lo apuñalo nereo pacheco era policia o militar en caracas fue hecho preso y mandado a la rotunda tenia privilegios salia y entraba asi q es falso que nereo estaba preso en 1914 o 1918

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