miércoles, 3 de septiembre de 2014

La maldición de los Átridas

Máscara de Agamenón, tumba V de Micenas

Cuando describí la "maldad" de Clitemnestra (aquí), la esposa asesina de Agamenón, mencioné los actos de canibalismo, incesto y violencia en la familia de su marido, mas no lo publiqué porque era un cuento verdaderamente raro y complicado. A mi juicio. no sólo era una familia disfuncional, sino que arrastraban alguna tara. Dejemos que sea Apolodoro en su Biblioteca mitológica (Alianza Editorial, Madrid, 2004), quien nos desenmarañe la historia de los Pelópidas de la cual existen varias versiones. El párrafo es muy largo. Para facilitar la lectura lo dividiré con sutítulos en negrillas:
La cordera dorada y el reino de Micenas.- Hijos de Pélope fueron Piteo, Atreo, Tiestes y otros. Mujer de Atreo, la hija de Catreo, Aérope, que amaba a Tiestes. Cierta vez Atreo, a pesar de que había hecho promesa a Ártemis de sacrificarle el ejemplar más bello de sus rebaños, se dice que, aunque apareció una cordera dorada, hizo caso omiso de su voto. Por el contrario, la asfixió y depositó en un arca, y allí la guardaba. Aérope se la da a Tieste, con el que le unía una relación adúltera. Pues bien, como tuvo lugar un oráculo que prescribía a los micenios elegir rey a un Pelópida, hicieron venir a Atreo y Tiestes. En la discusión que se originó a cuenta del reino, Tiestes manifestó al pueblo que debía obtenerlo quien tuviese en su poder la cordera dorada. Ya que Atreo se mostró de acuerdo, la exhibió y fue rey. Ahora bien, Zeus envía a Hermes a decir a Atreo que llegue a un acuerdo con Tiestes: que Atreo sea rey si caminare al contrario del Sol; una vez accedió Tiestes, el Sol efectuó la puesta en oriente, de modo que, con el testimonio de la divinidad sobre la estrategema de Tiestes, Atreo recibió el reino y exilió a Tiestes. 
Tiestes viola a su hija Pelopia
Atreo y los hijos de Tiestes.-Posteriormente, cuando se enteró del adulterio, lo mandó a llamar por medio de un heraldo para una reconciliación. Y afectando amistad, degolló a los hijos del recién llegado, que tenía de una ninfa náyade, y que eran Aglao, Calileonte y Orcómeno, a pesar de que se habían sentado como suplicantes en el altar de Zeus; y, tras despedazarlos y cocerlos, se los sirve a Tiestes sin las extremidades. Cuando estuvo ahíto, le muestra los miembros y lo exopulsa del país. Tiestes que buscaba por todos los medios vengarse de Atreo, consultaba al oráculo sobre el tema y recibe un vaticinio:que sólo lo logrará si engendra un niño en contacto carnal con su hija. Así lo hace pues, y engendra en su hija a Egisto, el que cuando se hizo hombre y se enteró de que era hijo de Tiestes mató a Atreo y restituyó a Tiestes el reino.
La historia es más complicada, pero por ahora lo dejamos así. Pelopia llegó a saber que su violador era Tiestes, su padre, y se suicidó. Pero los crímenes en la familia no se quedan allí:
Agamenón reina en Micenas y casa con Clitemnestra, hija de Tindáreo, tras dar muerte a su primer marido, Tántalo hijo de Tiestes, juntamente con su hijo. Le nace un varón, Orestes, y las hijas Crisótemis, Electra e Ifigenia... 
Egisto, hijo de Tiestes y Pelopia mató a Agamenón, quien a su vez fue vengado por Orestes y Electra. Interesante familia, sin duda.

Electra y Orestes, por Jean-Baptiste Joseph Wicar

martes, 2 de septiembre de 2014

Meditationes

Estatua ecuestre de Marco Aurelio Antonino. Museo Capitolino. Roma

Hace unos días conversaba con Gabriel el Librero sobre filosofía estoica y la charla nos llevó a Meditationes (Meditaciones, en castellano) del emperador Marco Aurelio Antonino (121-180), a mi juicio, uno de los últimos helenistas por su formación y forma de pensar y vivir. Me decía Gabriel, un joven que no llega a los 30 años de edad pero con conocimientos amplios y firmes, que ese libro le había ayudado en su vida personal.

Recuerdo que hace como año y medio compré a Gabriel un ejemplar en inglés, Meditations (Barnes & Noble, Nueva York, 2003) en una vieja traducción por George Long en 1909. Es un inglés un poco daté, pero le imparte un carácter propio a esta obra del "emperador filósofo". Además,está precedida por una Introducción a cargo de Andrew Fiala, profesor asociado de filosofía y estudios humanísticos de la Universidad de Wisconsin-Green Bay.

De la Introducción de Fiala tomamos algunos párrafos:
Marco Aurelio Antonino
Marco Aurelio Antonino, e, emperador romano, fue inspirado por el ideal griego de la filosofía como forma de vida. Las Meditaciones (compuestas ca 170-180 dC) es el el libro privado de reflexiones de Marco escrito en el curso de los años en lugares a los que llevó a las tropas romanas en campañas militares, aplastar revueltas y enfrentar otras tribulaciones de gobernar un imperio. Se describe mejor como un diario espiritual que contiene un récord de los ejercicios filosóficos de Marco. Si bien el libro es valioso por razones históricas como un documento de la vida interna de un destacado emperador romano, es la fuerza espiritual del libro lo que es verdaderamente extraordinario. Marco nos habla a través de los milenios acerca de los problemas humanos permanentes. El libro es  interesante como un ejemplo del pensamiento estoico, pero se mantiene llamativo porque es testimonio de un profundo viaje del espíritu humano.
(...) La ironía  del hecho que "el más gentil y amable de los filósofos y gobernantes" también perseguía a los cristianos no se perdió para los autores modernos (recuérdese que el texto de la Introducción es de 1909)  tales como John Stuart Mill, quien lo calificó como "uno de los más trágicos hechos en toda la historia". Si bien su entrenamiento filosófico lo orientó hacia hacia la tolerancia y hasta la compasión, sus deberes como emperador con frecuencia lo llevaron en dirección opuesta. Así Marco personifica la paradoja trágica del filósofo-rey que debe aplicar la ley y administrar justicia, mientras mira más allá de la política, hacia el punto de observación cósmico donde los problemas y tribulaciones de la política llegan a parecer triviales.
Leer con detenimiento a Marco Aurelio da gusto, en especial si lo leemos bien dosificado. Entonces podremos apreciar que no es un clásico cualquiera y que, tal vez esa sea la causa de su supervivencia, siempre se puede sacar algo positivo de él. Me pregunto por qué no pudo transmitirle a su hijo Cómodo un tanto de su sabiduría y al menos hacer de él un sucesor menos vergonzante; pero el muchacho tenía vocación de gladiador, no de filósofo, y tuvo un mal fin (que no es el que nos presenta Hollywood).

Lucio Aurelio Cómodo (161-192). Museo Capitolino Roma
Hijo y sucesor de Marco Aurelio Antonino. Su gobierno fue un desastre y terminó siendo asesinado por un gladiador a sueldo. Una vez muerto, la guardia pretoriana subastó el trono imperial una y otra vez en lo que se dio en llamar el año
de los cinco emperadores. Las cosas de aplacaron con la asunción de Septimio Severo.

lunes, 1 de septiembre de 2014

La Coromoto de Naiguatá

Nuestra Señora de Coromoto de Naiguatá
Imagen tomada del Grupo Devoción a Nuestra Señora de Coromoto, aparecida en Naiguatá

Desde hace varios meses teníamos pendiente avanzar en la larga lista de advocaciones marianas populares en Venezuela, según la lista del P. Pedro Pablo Barnola SJ (aquí). Hoy continuamos con una que fue muy popular, no solo en el Litoral central, sino en Caracas. Se trata de la Coromoto de Naiguatá, estado Vargas, que no hay que confundir con la Celestial Patrona de Venezuela.

El Hermano Nectario María en su libro La maravillosa historia de Nuestra Señora de Coromoto (San Pablo, Caracas, 2011), se refiere brevemente a ella sin entrar en muchos detalles. Veamos:
En la pequeña iglesia del pueblo de Naiguatá se venera una pequeña imagen de la Santísima Virgen, que también lleva el nombre de Nuestra Señora de Coromoto. Esta imagen está esculpida en una piedra azul de casi tres pulgadas de dimensión y, desde cerca de cien años se guarda en precioso relicario dorado.
Esta imagen representa a la Santísima Virgen en la misma posición que la milagrosa de Guanare; pero no tiene al Niño en los brazos. También difiere en la forma de la corona.
Todos los años se le hace rumbosa fiesta el día 8 de septiembre; a esta solemnidad concurren gran número de peregrinos de toda la costa del mar y de la ciudad de Caracas.
Desde 1877 una sociedad de distinguidos profesores de música de la capital obsequia en este día a la Virgen María en su santuario de Naiguatá con las armonías de sus bellos acordes.
La devoción a la Virgen de Coromoto es grande entre los habitantes de la costa del mar de la región de La Guaira y Naiguatá. La gente de los contornos tiene a La Coromoto, como ellos la denominan, por Patrona especial y protectora contra todos los peligros de la vida del mar, y cítanse no pocos casos de haber salvado muchos sus vidas, al invocarla en inminente peligro de naufragio.
El libro de HNM fue publicado por vez primera hacia 1925, por lo que muchos datos están sin actualizar. Tal es el caso de la sociedad de distinguidos profesores de música de Caracas que la obsequian en su fecha, cuyo datos fueron tomados de un artículo aparecido en una revista católica en 1904. La fiestas siguen siendo rumbosas, aunque ya no va tantos peregrinos caraqueños, y comienzan con una procesión el 30 de agosto, seguida de una novena preparatoria hasta el 8 de septiembre.

Buscando  información adicional, me topé con un artículo publicado por El Universal hace ya unos años, del cual resumo la historia de esta reliquia.

Relicario precioso de Nuestra Señora de Coromoto en Naiguatá
Imagen tomada del Grupo Devoción a Nuestra Señora de Coromoto, aparecida en Naiguatá
A mediados del siglo XVIII, cuando Naiguatá era un pueblo de indios, uno de los habitantes llamado Coromoto, fue a tomar agua en el manantial de Boquita de Casanarape, donde hoy se encuentra el club Puerto Azul. Allí encuentra una piedra con una imagen de una mujer con las manos en posición orante. Decidió tomarla e intercambiarla por algún producto en la pulpería, mas la piedra siempre regresaba a su mapire; trató de deshacerse de ella, pero siempre regresaba.

Decidió entonces contarles la historia los franciscanos curas doctrineros del pueblo, quienes observaron en ella una imagen de María y la consideraron reliquia por no haber sido una aparición sino un hallazgo. Decidieron entonces llevarla al templo de la misión donde permaneció hasta 1900, cuando un terremoto derriba el templo. Al hacerse la remoción de escombros, se encontró que la custodia o relicario esta intacto. lo que para los lugareños fue un prodigio.


viernes, 29 de agosto de 2014

La muerte del cristiano

El buen Pastor. Mausoleo de Gala Placidia, Rávena.
Hace días, cuando la gastroenteróloga me informó que los exámenes a unas muestras dieron positivo para cáncer, tuve mi primer encontronazo con la posibilidad real de morir. "El cáncer es curable, si se diagnostica a tiempo" era el slogan de la Sociedad Anticancerosa en los años 60 y 70, lo que sería cierto en un momento en que el Estado Venezolano se ocupaba de la salud de los ciudadanos. Hoy no hay remedios ni para la gripe; ya no basta con que te diagnostiquen a tiempo, requieres también el material para la radio y la quimio que se deba aplicar.

Al contrario de muchos venezolanos, no le tengo miedo a la muerte, que es el paso a una vida mejor, sino que siento curiosidad por saber de qué moriré. Debo confesar que la noticia me aguó el guarapo y hasta se me salieron las lágrimas. Lo peor es que esas lágrimas surgían de un apego a los bienes materiales y no por que dejara atrás una viuda pobre cargada de hijos, o a una madre viuda sin sostén alguno. Mi primer pensamiento fue (¡Qué vergüenza!), mis libros, mis pipas, mis teteras. Cuando uno muere nada es tuyo; te llevas lo que diste y entregaste al prójimo. La muerte para una persona sin problemas como yo no debe ser sino una oportunidad para tener una buena muerte: perdonar las ofensas de otros, pedir perdón a quienes hemos ofendido, enmendar entuertos, ser generosos...

Ya de vuelta en casa, un tanto preocupado, me puse a reflexionar. Un buen cristiano no debe apegarse a los bienes terrenales; al contrario, son un impedimento para entrar a la Patria Celestial. No es esto beatería como la de aquella vecina que me decía que no fuera a hacerme exámenes sino que fuera a una "misa de sanación" (eso es fanatismo y prefiero reservarme mis comentarios de católico serio con respecto tales actos). Dios no nos resuelve los problemas, ni hace lo que nos de la gana ni mucho menos es médico. Él nos da fuerza para llevar la cruz que nos ha asignado y nosotros debemos asumirla con humildad. Al final, y así lo escribí a un amigo sacerdote, "hágase la voluntad de Dios que es la misma mía".

Veamos qué nos dice sobre el particular el Catecismo de la Iglesia Católica ( Asociación de Editores del Catecismo, Madrid, 1992):
Frente a la muerte, el enigma de la condición humana alcanza su cumbre (GS 18). En un sentido; la muerte corporal es natural, pero por la fe sabemos que realmente es "salario del pecado" (Rm 6, 23 cf Gn 2, 17). Y para los que mueren en la gracia de Cristo, es una participación en la muerte del Señor para poder participar también en su Resurrección (cf Rm 6, 3-9; Flp 3, 10-11)
La muerte es el final de la vida terrestre. Nuestras vidas están medidas por el tiempo, en el curso del cual cambiamos, envejecemos y como todos los seres vivos de la tierra, al final aparece la muerte como terminación normal de la vida. Este aspecto de la muerte da urgencia a nuestras vidas: el recuerdo de nuestra mortalidad sirve también para hacernos pensar que no contamos más que con un tiempo limitado para llevar a término nuestra vida...
Con respecto al sentido de la muerte cristiana, agrega el Catecismo:
Gracias a Cristo, la muerte cristiana tiene un sentido positivo. "Para mi, la vida es Cristo y morir una ganancia (Flp 1, 21) "Es cierta esta afirmación: si hemos muerto con él, también viviremos con él" (2Tm2,11). La novedad esencial de la muerte cristiana está ahí: por el Bautismo, el cristiano está ya sacramentalmente "muerto en Cristo", para vivir una vida nueva; y si morimos en la gracia de Cristo, la muerte física consuma este "morir en Cristo" y perfecciona así nuestra incorporación a Él en su acto redentor
(...) En la muerte, Dios llama al hombre hacia sí. Por eso, el cristiano puede experimentar hacia la muerte un deseo semejante al de San Pablo; "Deseo partir y estar con Cristo" (Flp1, 23); y puede transformar su propia muerte en un acto de obediencia y de amor hacia el Padre, a ejemplo de Cristo.
(...) La muerte es el fin de la peregrinación terrestre del hombre, del tiempo de gracia y de misericordia que Dios le ofrece para realizar su vida terrena según el designio divino y para decidir su último destino. Cuando ha tenido fin "el único curso de nuestra vida terrena" (LG 48), ya no volveremos a otras vidas terrenas. "Está establecido que los hombres mueren una sola vez" (Hb 9, 27). No hay "reencarnación" después de la muerte.
Pues bien, al final los últimos exámenes salieron más promisorios y, si bien no hay tumores, se requiere quimioterapia para las células cancerígenas que andan sueltas por allí. Ven? Dios, en su infinita misericordia, siempre provee. Ahora sólo me queda ofrecer el malestar del tratamiento por la diócesis a la que pertenece mi amigo sacerdote.

Buena lección... gracias, Señor.

Pavo real, símbolo de la inmortalidad del alma 


miércoles, 27 de agosto de 2014

Rambo en París

Los hombres de la Comuna
L'Illustration, 15 de julio de 1871

CANTO DE GUERRA PARISIENSE


¡La primavera es evidente, puesto que
del corazón de las propiedades verdes,
el vuelo de Thiers y de Picard
mantiene sus esplendores ampliamente abiertos!

¡Oh, mayo! ¡Qué delirantes traseros desnudos!
Sévres, Meudon, Bagneux, Asniéres,
Escuchad pues, los bienvenidos,
sembrar las cosas primaverales.

Tiene chacó, sable y tam-tam,
no la vieja caja de bujías
y con sus yolas que no tienen jam-jam
hienden el lago de aguas enrojecidas.

Más que nunca armamos jarana
cuando llegan sobre nuestros cubiles
y se desploman los amarillos tachones
en los amaneceres privados.

Thiers y Picard son unos Eros
robadores de heliotropos;
con los petróleos hacen Corots:
he aquí abejorrear sus tropas...

¡Son familiares del Gran Truc!...
Y Favre tumbado sobre los gladiolos
hace sus pestañeo acueducto
y sus ronquidos a la pimienta.

La gran ciudad tiene el pavimento caliente
a pesar de vuestras duchas de petróleo,
y decididamente tenemos
que sacudiros de vuestro papel...

Y los rurales que se arrellenan
en prolongados acuclillamientos,
¡oirán los ramajes que se rompen
entre los rojos apretujones!

Cosas primaverales

CHANT DE GUERRE PARISIEN

Le Printemps est évident, car
Du cœur des Propriétés vertes,
Le vol de Thiers y de Picard
Tient ses splendeurs grandes ouvertes !

O Mai ! Quels délirants cul-nus !
Sèvres, Meudon, Bagneux, Asnières,
Écoutez donc les bienvenus
Semer les choses printanières !

Ils ont schako, sabre et tam-tam,
Et des yoles qui n’ont jam-jam…
Fendent le lac aux eaux rougies !

Plus que jamais nous bambochons
Quand arrivent sur nos tanières
Couler les jaunes cabochons
Dans des aubes particulières ! 

Thiers et Picard sont des Éros,
Des enleveurs d’héliotropes ;
Au pétrole ils font des Corots :
Voici hannetonner leurs tropes…

Ils sont familiers du Grand Truc !...
Et couché dons les glaïeuls, Favre
Fait son cillement aqueduc,
Et ses reniflements á poivre !

La grande ville a le pavé chaud
Malgré vos douches de pétrole,
Et décidément, il nous faut
Vous secouer dans votre rôle…

Et les Ruraux qui prélassent
Dans de longs accroupissements,
Entendront des rameaux qui cassent
Parmi les rouges froissements !


Fuente: 
Rimbaud, obra completa, prosa y verso. Edición bilingüe
Libros Río Nuevo, Barcelona, 1977

Sobre el momento histórico.-
Para comprender este poema de Arthur Rimbaud es necesario ubicarse en el momento histórico del que trata. Los editores lo explican:
El 18 de marzo de 1871, Thiers se refugió en Versailles y la Commune se hizo cargo del poder. Los burgueses, el ejército regular y los parlamentarios de Burdeos se instalaron en Versailles y a partir del 2 de abril empezaron a llover bombas sobre los suburbios de París. Thiers y Picard dirigían las tropas regulares. Las bombas son llamadas por Rimbaud, choses printanières. Acababa de inventarse la lámpara de petróleo que sustituyó a las bujías. Hay que conocer la letra de la canción infantil Petit Navire para comprender el jam-jam que rima con tam-tam. Jules Favre había negociado la capitulación con Bismarck. Los Rureaux representan el partido de los grandes propietarios antirrepublicanos.
Estos y mil otros detalles históricos de aquel momento, es necesario conocer para comprender el intrincado puzzle de los versos de Rimbaud.
La Comuna de París. Grabado de la época
¡Quiero ser libre!... Es mi derecho y me defiendo
 De cualquier manera, la publicación en esta bitácora del poema de Rimbaud es simplemente una excusa para colocar una curiosidad que me hizo saber Jesús el Librero.

¿Qué tiene que ver Rimbaud con Rambo? 


John James Rambo, el veterano de guerra interpretado por Silvester Stallone fue una creación del novelista estadounidense David Morrell, quien utilizó el apellido del poeta francés Arthur Rimbaud, pero pronunciado a la americana, para darle una identidad a sus personaje. No me imagino a Rambo escribiendo poemas, ni a Rimbaud echando plomo.