martes, 28 de agosto de 2012

La guerra social

Bolívar y la Guerra Social.
 
Prometí, al comentar la novela Boves el Urogallo, que trataríamos el tema de la guerra social en Venezuela a través de una obra del político e intelectual dominicano Juan Bosch.  Conocí este ensayo cuando, siendo Segundo Secretario, se me asignaron los escritorios de las Antillas Mayores en la Dirección de Política Internacional del MRE.

Cada escritorio tenía una pequeña biblioteca nutrida con los libros que enviaban las Embajadas; poco había sobre Haití; de Cuba mucha propaganda del régimen, pero República Dominicana tenía, entre otros, Bolívar y la Guerra Social, título interesante que se hacía aún más provocativo cuando se conocía al autor; el legendario Juan Bosch.

Los pocos ratos de ocio que disfrutaba, y alguna hora extra, aproveché para medio leer este libro. Como no acostumbro a apropiarme de lo que no es mío, no me quedé con él (nadie lo hubiera notado) y me propuse conseguirlo. Unos 25 años después, paseando por el mercadillo de libros usados, estaba Juan Bosch gritándome desde una pila de libros: ¡Aquí estoy!... Bolívar y la guerra social (Editora Alfa y Omega, Santo Domingo, 1979). La misma edición del que había leído con anterioridad.

La tesis que sostiene el Dr. Bosch afirma que no fue afán de gloria lo que llevó a Simón Bolívar a libertar media América, sino el temor a un resurgimiento de una guerra social tan destructiva como la que encabezó el Taita Boves. Veamos lo que nos dice el autor:
Tropas del Taita Boves
Los resultados de la guerra social venezolana de 1812-1814 fueron inmediatos y tardíos. Los primeros significaron la destrucción física de la nobleza criolla, los mantuanos que proclamaron la independencia; los segundos resultaron, desde el punto de vista de la lógica aparente de la historia, los más inesperados. Pues fueron los mismos hombres que aniquilaron a los independentistas de Venezuela los que hicieron bajo el mando de Bolívar la independencia de ese país y de varios más, y fue el miedo de Bolívar a que la guerra social venezolana se reprodujera en Venezuela lo que le llevó hasta el Potosí y lo que le hubiera llevado, de permitirlo la situación política internacional, hasta Cuba y Puerto Rico. Bolívar libertó media América porque les buscó ocupación en lugares lejanos a los hombres que podían resucitar en Venezuela la guerra social; esto es, convirtió en libertadores de Nueva Granada, de Ecuador, Perú y Bolivia a los llaneros de Boves y Morales, y faltó poco para que los llevara a las islas españolas del Mar Caribe, por miedo a que hicieran de nuevo lo que ya habían hecho una vez.
Simón Bolívar
El Libertador
1783-1830
Simón Bolívar no hizo eso de manera inconsciente o por afán de gloria, aunque él amaba la gloria en forma casi desesperada. En muchos de sus manifiestos, en muchas de sus cartas, dejó dichas cuáles fueron las razones que lo llevaron a derramar ejércitos libertadores por lugares lejanos; y no lo dice de manera confusa o sibilina, sino en forma que no deja lugar a dudas.
El país que Bolívar quiso verdaderamente, con pasión casi primitiva, fue el suyo, Venezuela, "Caracas", como le llamaba él en las horas en que se quedaba a solas con los recuerdos de su infancia; y esa Caracas, desorganizada primero por Monteverde  y destruida después por Boves, fue la imagen que tuvo siempre en el corazón. Bolívar llegó como Libertador hasta los Andes del Sur porque necesitaba alejar de Venezuela a los que podían reiniciar en cualquier momento la obra de Boves. Vano intento el suyo, pues como las condiciones sociales que hicieron posible la aparición de Boves permanecieron sin transformación, a mitad del siglo XIX, cuando todavía no habían comenzado a pudrirse los huesos del Libertador, Venezuela volvió a ser escenario de otra guerra social de poder destructor parecido al de la primera.
Ezequiel Zamora
1817-1860
Esta fue la llamada Guerra Federal. Su jefe no era el asturiano José Tomás Boves sino el venezolano Ezequiel Zamora; su bandera no era la del absolutismo de Fernando Séptimo sino la del liberalismo que predicó Antonio Leocadio Guzmán; sin embargo, a pesar de las diferencias de sus jefes, la Guerra Federal fue una segunda parte de la Guerra Social, ni más ni menos. De manera que el miedo de Bolívar había tenido razón de ser y la historia lo justificó.
La segunda parte de la guerra social venezolana hubiera podido evitarse únicamente mediante la transformación de las condiciones sociales y económicas del país; no, como lo pretendió Bolívar, sacando de Venezuela a los que podían hacerla. Esos no la hicieron, pero la hicieron los que eran o podían ser sus hijos. Ahora bien, el genio de Bolívar produjo resultados de gran utilidad a la historia americana, pues con los llaneros que sacó de Venezuela libertó a Nueva Granada, Ecuador, Perú y Bolivia. Otro con menos categoría que él hubiera pretendido resolver el problema llevando al patíbulo a los jefes de los posibles revolucionarios -y de hecho, él comenzó a actuar así cuando fusiló a Piar-. A su claro juicio político, pues, hay que atribuir la desviación de la guerra social venezolana hacia una guerra libertadora americana, y no a falta de condiciones para imponer el terror.
Juan Bosch
autor
1909-2001
El ensayo de Juan Bosch no sólo está bien documentado y escrito, sino que también está desprovisto de esa tendencia a la mitología patria tan frecuente en la historiografía venezolana. Bosch escribió su libro durante su exilio en Puerto Rico (1964), a partir de una notas que había tomado en Caracas para la publicación de una biografía del Libertador (Distribuidora Escolar, Caracas). Él mismo se excusa al lector por la falta de citas bibliográficas "...pero puede asegurar que el hecho de que cada cita haya sido tomada y escrupulosamente copiada, de la correspondencia y de otros papeles de Bolívar, así como el hecho de que en cada cita se mencione la fecha de la carta, la proclama o el discurso del Libertador en que figuran sus palabras, permite hallar con facilidad la fuente".

Queda una pregunta en el tintero... ¿Cómo convenció Bolívar a esos criminales de guerra a convertirse en libertadores? Llega don Pablo Morillo luego de la muerte de Boves... Ese será el tema de la próxima entrega.

Y un poco de humor, porque no todo puede ser rigor...


2 comentarios:

  1. Una versión diferente a la de "toda la vida"; bien interesante y con un final divertidísimo con Emilio Lovera...
    Un lujo completo!
    Gracias primo!
    Marga

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