1
En el templo silencioso, frío, inmenso del espacio
la enlutada noche reza su rosario de diamantes
con su manto de tinieblas, negro lúgubre, viudas
doloridas, vacilantes
como lágrimas piadosas por un paño funeral.
¡Oh las pálidas estrellas! ¿Son los ojos de los ángeles
o las almas de los muertos que nos miran tristes gentes
desterrados en aqueste fosco valle del dolor?
¿Las aureolas de los santos, o las lámparas ardientes
de las vírgenes prudentes
aguardando soñolientas la venida del señor?
2
En el templo majestuoso, claro, inmenso del espacio
la radiante noche teje su guirnalda de áureas flores
que al altar del firmamento inefable aroma dan:
y se entreabren dulcemente con suavísimos fulgores
los luceros tembladores,
y es un lirio blanco Sirio, una rosa Alderabán
¡Oh las pálidas estrellas! ¿Son las perlas de esos mares
infinitos? ¿Son las joyas de la virgen esparcidas?
¡O las místicas antorchas del banquete celestial?
¿Son las luces de la patria suspirada? ¿Las ya idas
esperanzas queridas
que murieron en las cruces donde esplende el ideal?
3
En la calma silenciosa de las noches estrelladas
la eternal magnificencia a la mente maravilla
al espíritu amedrenta con tremenda majestad;
más que el brillo de los soles amo yo tu lucecilla
primorosa lamparilla
que iluminas de la Hostia la profunda soledad.
Siempreviva del santuario, amorosa sulamita
que compartes la tristeza del Amado que te cela,
y calientas con sus rayos su albo lecho virginal.
¡Cómo envidio tu ventura, vigilante centinela,
tú que cuentas siempre en vela
tú que cuentas siempre en vela
los latidos inefables de su pecho paternal!
4
¡Oh Jesús enamorado, tierno esposo de mi alma,
no me basta ser el cirio que en las horas de alegría,
se consume en tus altares en ardiente adoración:
en tus horas de abandono quiero hacerte compañía,
haz que tenga noche y día
como lámpara eucarística encendido el corazón!
No me apartes, Jesús mío, de la estrella del sagrario;
vayan otros poseídos del piadoso noble anhelo
la grandeza de tus obras en el orbe a contemplar;
y a buscar para adorarte con ferviente, santo celo
el inmenso altar del cielo.
¡Tú me bastas, Amor mío, en el cielo del Altar!
El padre Carlos Borges (1867-1932) es el autor del bello poema místico que acabamos de leer. Difícilmente podría pensarse que también sea, según Julio Garmendia, el padre de la poesía erótica venezolana. Pero el P. Borges fue así; vivía en un vaivén entre su sentida vocación sacerdotal y una vida pública y privada que fue escándalo de los fieles y un dolor de cabeza para la jerarquía católica venezolana. Políticamente fue lo que en el lenguaje del siglo XIX se llamaba un "áulico"; siempre pegado al poder, al servicio de los tiranos Cipriano Castro (El Cabito, El Mono Lúbrico, Siempre Invicto) y Juan Vicente Gómez (El Bagre, El Benemérito General). Arturo Uslar Pietri lo pone como personaje central en su novela Oficio de Difuntos bajo el nombre de Padre Solana ("Yo nací para escandalizar. Ha sido un sino de toda mi vida"). Su mismo carácter lo llevó a una vida azarosa hasta que se encontró con Juan Vicente Gómez, quien en cierto modo lo aplacó y dio un uso a su capacidad intelectual, como su capellán y como orador cívico y sacro.
Rafael Arráiz Lucca en su Antología de la Poesía Venezolana (Panapo, Caracas, 1997), refiriéndose a Borges, nos dice:
No es una noticia sin importancia el hecho de que el poeta haya sido sacerdote de la Iglesia Católica, por el contrario, mucha de la pasión con las que están escritos sus versos tiene su fuente en la devoción sacra. Dicen sus biógrafos que se destacó como orador en el púlpito y como hombre de la Iglesia. Pero parece ser que su vida dentro de la institución milenaria no fue del todo cómoda. Conoció la expulsión, dada su pulsión tumultuosa, pero también mordió la arena del arrepentimiento y regresó al redil. El erotismo de su poesía es insoslayable: ardió en él la vena erótica de los místicos. Antonio Arráiz opinó de su obra: "Y los que oían o leían sus poemas sentíanse estremecidos por una inexperimentada fruición, semejante a la que produce la mezcla de lo dulce y de lo ácido en una fruta tropical, por aquella mezcla de pecado y de piedad, de sensual delectación y de ardiente misticismo, que revelaba en su autor la dualidad del poeta pagano, enamorado de la vida, y del poeta cristiano, con las miradas fijas en el más allá".En vida, Borges publicó un breve tomo denominado Páginas Selectas (1917). Fue en 1955 cuando el Ministerio de Relaciones Interiores publicó una antología más completa, Páginas Perdurables, a cargo de José Manuel Núñez Ponte (Biblioteca Rocinante, Caracas), reeditada y ampliada en 1971 por Enrique Requena Mira. La obra del padre Borges es tan variada que pronto volveremos a él. Por lo pronto, les dejo un poema sensual.
RIMAS GALANTES
Quiero verte desnuda como una azucena
manecita de seda candorosa y fragante:
Quiero verte desnuda como un lirio, filena
florecita que oculta el capullo del guante.
Dulce fruta vedada, la serpiente me incita,
es goloso mi labio y con sed delirante,
beber quiero la gloria de tu miel exquisita,
manzanita que guarda la corteza del guante.
Sirio triunfa en la inmensa joyería del cielo:
Muestra al rey de la noche tu blancura radiante,
y verás como al punto Sirio rabia de celo.
Joyelito que ocultas el estuche del guante.
Aduérmete en mi mano como una paloma,
en un nido viviente que te arrulle y encante,
ya verás como sueñas el edén de Mahoma,
palomita que tiemblas en el nido del guante.
El calor de tu sangre que da fiebre chicina,
la nieve de la perla, el agua del diamante
se incendian alumbrando tu blancura divina,
duquesita que ardes en el seno del guante.
Por ti lloro; si quieres disipar la maligna
intención que me inspire un Mefisto galante
con el agua bendita de mis ojos te signa,
hermanita que sueñas en la celda del guante.
Blanca hija de Jairo en el mármol dormida,
permite que mi labio te oprima un solo instante;
mi beso es taumaturgo y te dará la vida.
Muertecita que envuelve la mortaja del guante.
Bueno...a la tercera va la vencida pues inspirado había escrito algunas líneas que se esfumaron no sé por que razón pero hace rato tu página me decía "Service Unavailable. Error 503"
ResponderEliminarA ver que será
Blogger haciendo travesuras.
EliminarY aquí le esoy fastidiando nuevamente con mis largos comentarios que parecieran más bien cuentos de centenario.
ResponderEliminarComo ratón de libros conocí primeramente las Obras Completas o Escogidas del padre Carlos Borges quien fue hermano del músico Raúl Borges.
Esos libros porque fueron dos, recopilados por un señor que conocí cuando estaba en Fábrica Nacional de Cementos y quien se llamó Miguel Mosquera Suárez no me cabe la menor duda de que fueron los que patrocinó y apadrinó el gran Don Enrique Requena Mirá, español acaso andaluz o gitano, gran librero y experto en libros jurídicos de actualidad aunque su negocio estaba atiborrado con todo tipo de libro y los libros de arte y literatura habían sido su fuerte durante no se cuantos años. Él murió hace acaso más de 25 años y está enterrado en Maracaibo, su viuda Aura, matrona de libreros, suele sentarse cerca de los maracuchos "Bajo el Puente de las FA".
Algunos artículos del padre Borges descansan en revistas como Billiken y acaso Elite y probablemente el gran diario del gomecismo "El Nuevo Diario". Conocí a un señor que ya murió : José González González que entre tanto que guardó y recopiló y vendió, tenía una "Colección sobre el Padre Borges". A González le debe haber interesado mucho, González fue dueño de cines y películas para adultos y tenía una colección de literatura pornográfica vieja que la mantenía bajo llave para evitar manos inocentes y curiosas. Aquella colección "sobre Borges" se la compré y ciertamente pudo él haber conocido al Padre o a sus hermanos y muy llamativo le habrá parecido que un prelado protegido y regañado por el Benemérito y a quien le gustaba la bohemia pero que tambien manejó sus asuntos con la iglesia con seriedad, algo de ebriedad, jocosidad, diversión y política se haya podido desenvolver en su tiempo.
Confieso que de las cosas más curiosas que mi amigo y recordado González coleccionó sobre y con escritos del Padre Carlos Borges me aplaudo por ellas aún más que por el Padre y su época por lo que son: recuerdos de tiempos pasados.
¡Qué suerte la tuya al tener en tus manos esa colección de Borges; buen poeta, prosador y orador civil y sacro! El personaje era tal cual y como lo describes.
EliminarFelicitaciones y disfrútalo, que eso es un tesoro.
Voy doble contra sencillo que no publicas ni una de las décimas del padre Borges. Un gran amigo, antiguo embajador en el Cono Sur, se las sabe de memoria y me las recitó, pero nunca he logrado que las ponga por escrito y me las mande. Y yo olvidé las pocas que sabía
ResponderEliminarNo las he publicado. Déjame chequear en la antología que tengo a ver si aparece alguna.
EliminarNo creo las encontrarías entre los libros del padre Borges que se publicaron en editoriales "decentes". Correponde al estilo "cantar que va por la vida, parece una mariposa, que en lugar de flor en flor, se posa de boca en boca" En resumen, de tradición oral salvo que alguien resolviera ponerlas por escrito, a medida que las iba descubriendo pero para su propio uso y consumo. Lo que tu mismo dijiste: "Conocí a un señor que ya murió : José González González que entre tanto que guardó y recopiló y vendió, tenía una "Colección sobre el Padre Borges". A González le debe haber interesado mucho, González fue dueño de cines y películas para adultos y tenía una colección de literatura pornográfica vieja que la mantenía bajo llave para evitar manos inocentes y curiosas. Aquella colección "sobre Borges" se la compré y ciertamente pudo él haber conocido al Padre o a sus hermanos y muy llamativo le habrá parecido que un prelado protegido y regañado por el Benemérito y a quien le gustaba la bohemia pero que tambien manejó sus asuntos con la iglesia con seriedad, algo de ebriedad, jocosidad, diversión y política se haya podido desenvolver en su tiempo.". Y, además,ese estilo esta tan fuera del tuyo propio como de que repente en la puerta del blog pusieras aquel letrero "Hic est felicitas.." aunque no estoy segura que dijera exactamente asi
EliminarEn efecto, no está en la antología (de los años 50).
EliminarEl del comentario del criptopornógrafo no fui yo, sino un lector anónimo.
Feliz fin de semana.
Nunca les pregunté al Sr. Mosqueda Suárez que lo motivó una recopilación de los escritos del Padre Borges y una segunda edición mejorada y ampliada. O preguntarle al Sr. González haber coleccionado publicaciones y escritos de tan distinguido e inspirado y curioso poeta. ¿Acaso era dla belleza y rima de sus obras? ¿Acaso porque fue un caso muy particular en su tiempo?. Lo cierto es que compilador y coleccionista murieron hace años y no ha aparecido una nueva antología inclusive ilustrada con las muchas fotos que deben de haber del Padre bien por el lado de la familia Borges o por el lado de las imágenes oficiales de Torito, Gámez, etc. Sería muy interesante porque inclusive las ediciones de Mosqueda y otras son bastante escasas y habría que meterse de cabeza en La Gran Pulpería de Libros Venezolanos para caso hallarlas.
ResponderEliminarMe imagino que fue no solo por su buena poesía modernista, sino por la vida novelesca de Borges.
EliminarPor favor quisiera conseguir las décimas del padre Bourges ya que me recuerdan a mi papa ya que repetía una frase que dice este lindo prendedor de tan enroscadas clines .....
ResponderEliminarmandamelo cuando lo consigas . yo tuve la misma experiencia con mi tio mas querido que siempre lo recitaba
Eliminarenroscadas cRines
no me lo coloco el senor
solo para echar orines
¿Alguien tiene las DÉCIMAS DEL PADRE BORGES? Gracias
Eliminarmlmontanari@hotmail.com
Hay una estrofa, atribuida al padre Carlos Borges, que recuerdo desde mi adolescencia y que decía así:
ResponderEliminarAcúsome padre de un mal pensamiento
Que en las Ursulinas me inspiró Satán
De ver en el basto confín de un convento
Pasearse una monja con el capellán
¿Alguien tiene las DÉCIMAS DEL PADRE BORGES? Gracias
ResponderEliminarmlmontanari@hotmail.com